¿VIVIMOS ENCADENADOS EN UNA CAVERNA?

 ¿Alguna vez habéis sentido que vivís en una especie de simulación? ¿O que nada de lo que está sucediendo es real? La verdad es que creo que es algo que todos hemos pensado alguna vez, pero luego nos parece una idea absurda, pero, ¿y si es verdad que todo es una simulación y que en realidad hay alguien espiándonos y estudiándonos? ¿O que vivimos en una especie de Show de Truman o una nueva versión del mito de la caverna como en películas como la nombrada anteriormente o Matrix? 


En el mito de la caverna es un diálogo escrito por Platón, en el que su maestro Sócrates y su hermano Glaucón hablan sobre cómo afecta el conocimiento y la educación filosófica a la sociedad y los individuos.

En este diálogo, Sócrates pide a Glaucón que imagine a un grupo de prisioneros que se encuentran encadenados desde su infancia detrás de un muro, dentro de una caverna. Este observa la luz del fuego más allá del muro, cuyo resplandor le ciega y casi le hace volver a la oscuridad. Poco a poco, el hombre liberado se acostumbra a la luz del fuego y, con cierta dificultad, decide avanzar. El hombre aquí razona de tal forma que concibe a ese mundo exterior, como un mundo superior. 

El hombre, entonces, regresa para compartir esto con los prisioneros en la caverna, ya que siente que debe ayudarles a ascender al mundo real. Cuando regresa a la caverna por los otros prisioneros, pero estos no le creen.


Si analizamos este mito, podemos ver que es una alegoría que abarca la teoría de las ideas, que se basa en dos conceptos contrapuestos: el mundo sensible, mediante los sentidos; y el mundo inteligible o de las ideas, mediante el conocimiento, la realidad y el sentido de la vida. Esto hace un análisis de 3 ideas:

  • Dimensión antropológica, de la naturaleza humana. Cuerpo y alma son dos dimensiones diferentes. El cuerpo está inmerso en el mundo sensible, corruptible y cambiante, mientras que el alma está unida al mundo de las ideas, que es perfecto e inmutable. Los prisioneros son una metáfora de las personas que están atadas a sus percepciones y las imágenes que se les presentan. Las sombras son el mundo físico que perciben y que creen es el conocimiento verdadero. 

  • Dimensión ontológica, del ser; y epistemológica, del conocimiento. Cada elemento del mito de la caverna simboliza un nivel del ser y del conocimiento, dentro del dualismo ontológico y epistemológico de Platón. Precisamente, la alegoría de los hombres apresados dentro de una caverna y del hombre liberado en el exterior, funciona para explicar su concepción dualista del mundo.

  • Dimensión moral, que valora la sociedad; y política, la forma de gobernar. Para Platón, el mundo de las ideas es donde el alma del hombre encuentra el conocimiento. Ya que el prisionero liberado presencia el mundo ideal, al ascender y experimentar el exterior de la caverna, este siente el deber de compartir lo vivido. La caverna es la prisión de la apariencia, de lo puramente sensible, de reflejos e imágenes, mientras que el mundo ideal y la idea del Bien son el verdadero conocimiento. La democracia del pueblo, en Platón, es similar a lo que acontece dentro de la caverna, ya que las personas habitan en un mundo sensible y deben ser guiadas por el filósofo-político o filósofo-rey.


El show de Truman, Truman es un hombre que tiene en cautiverio como si fuera un animal en un zoológico donde tiene un “micromundo” creado con 5000 cámaras solo para observarle a él.

Todo es perfecto hasta que un día de camino al trabajo hay un problema en la radio. Por accidente el canal por donde habla el director del programa con el resto de actores y dirigentes del programa, es el que se oye en la radio en vez del programa que suele escuchar habitualmente. con todos los actores. Mientras que Truman conduce el coche se escucha en la radio por todos los sitios que va pasando, su posición actual. Esto le extraña bastante, y empieza a sospechar y a preguntarse.

Recuerda un amor que tuvo en la adolescencia que le confesó que todo lo que ocurría era falso. A partir de errores que siguen sucediendo, decide desenmascarar esa farsa e incluso escapar. ¿Y si no hubiesen ocurrido esos fallos? ¿Seguiría Truman siendo feliz a pesar de que vive en “cautividad”? ¿Viviendo en aquel mundo que para él era el real?


Si lo pensamos, este último relato es una versión del anterior. El prisionero que escapa es Truman, y las figuras de la hoguera son los extras del show y el director del programa el que encierra a sus prisioneros y crea esa falsa realidad en la que viven. Al principio todos son felices hasta que descubren la verdadera realidad que antes no conocían.


¿Y nosotros podríamos estar encerrados en un show como Truman o en una caverna como los prisioneros? Desde mi punto de vista, una caverna o falsa realidad de la vida cotidiana son las redes sociales. A través del photoshop y la sociedad, se crean estereotipos y cánones de belleza que crean inseguridades a aquellas personas que no cumplen los estereotipos establecidos, que en realidad son falsos y editados con apps y métodos que distorsionan la realidad. 

De vez en cuando tenemos que centrarnos y  pararnos a pensar en lo que es real y lo que no, que todo es cuestión de gustos y que tenemos que querernos tal como somos. Quitarnos las cadenas y escapar de esas cavernas que nos aprisionan y nos impiden ver la realidad. 

Muchas veces la ignorancia está muy bien, nos hace ser más felices en muchos aspectos, pero la libertad es necesaria, y poco a poco descubrir lo que hay tras los muros de esa caverna que nos aprisiona.

Y tú, ¿prefieres vivir en la ignorancia o siendo libre?



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